martes, 11 de octubre de 2011

Justin Bieber, un adulto a los 17...





  En solo dos años de carrera profesional, Justin alcanzó una fortuna de 53 millones de dólares y se ubicó segundo en un ranking elaborado en junio por la revista Forbes, que enumera a las 20 celebridades mejor pagas menores de 30 años, y Justin se posiciona tras Lady Gaga. 

  Está de novio con Selena Gómez, otra jovencita de 19 años, cantante y actriz, quien es dueña de la suma de 4 millones. Claro, que no se compara con los 53 de su pareja. Juntos llevan una vida de magnates… Y de adultos.

  Pasean en una Ferrari negra, viajan juntos en avión privado y sus vacaciones incluyen paraísos como Maui, en Hawaii. En esa oportunidad se alojaron en un hotel frente al mar a… ¡10.000 dólares la noche! Circularon fotos de la parejita en la playa, repartiendo besos y caricias apasionadas.

  Desde los 12 años Selena llevaba un “anillo de pureza”, que es un símbolo de castidad y un compromiso de ser virgen hasta el matrimonio. Pero, desde que está saliendo con Justin, dejó de usarlo.

  ¿Qué dicen los padres?

  Justin tuvo una infancia triste y humilde. La biografía no autorizada cuenta que los padres se divorciaron pocos años después de su nacimiento. A la madre le costó criarlo sola y vivían en una de las zonas más pobres de Stratford, en Canadá. Cuando iba a la escuela, sus compañeros se burlaban por la ropa que llevaba.

  Hoy vive una realidad muy distinta y se rumorea que los padres están un poco preocupados. Notan que el chico está demasiado cambiado, tanto en la forma de ser como en el look.

  Tampoco les convence la velocidad con la que marcha la relación. De todos modos, cuando les preguntan dicen que “es una buena chica”. Prefieren hacer oídos sordos a todo, incluso, a que Justin esté perdiendo su acento canadiense y haya cambiado su forma de hablar.



  Fuente: Sección "Entremujeres" - Clarín.


  Ustedes ¿que opinan de esta pareja?

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